Eficiencia energética y mejora de la calidad de aire interior.
Los recuperadores de calor son sistemas de ventilación eficientes que basan su funcionamiento en tres premisas básicas:
- Renuevan el aire de los espacios extrayendo el aire viciado e introduciendo aire limpio y filtrado, incidiendo claramente en la mejora de la calidad del aire interior.
- Regulan la temperatura interior mediante la extracción del aire interior y la impulsión de aire exterior a diferentes temperaturas.
- Recuperan la energía del aire más caliente, que es cedida en el intercambiador al cruzarse, pero sin mezclarse, con el aire mas frio. Dependiendo de la época del año este proceso se dará en un sentido u otro, siendo en invierno el aire interior el que transfiere su energía al exterior que es más frio y, por el contrario, en verano será el exterior el que transfiera su energía al interior.
Los Recuperadores de Calor están regulados por el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE), que en su en su Instrucción Técnica IT 1.2.4.5.2.1 especifica que “en los sistemas de climatización de los edificios en los que el caudal de aire expulsado al exterior por medios mecánicos sea superior a 0,28 m3/s, de acuerdo con lo establecido en el reglamento de diseño ecológico para las unidades de ventilación, se recuperará la energía del aire expulsado”.