Conseguir una idónea calidad de aire interior es imperativo para el cuidado de la salud de las personas.
El 75% de los europeos y el 54% de la población mundial vivimos en ciudades en las que la calidad del aire no es siempre la más idónea. Pocas veces somos conscientes de las características del aire que respiramos, tanto al aire libre como en espacios cerrados. En estos mismos espacios, si bien podemos tener la sensación de que estamos protegidos de la contaminación del exterior, podemos también estar expuestos a contaminantes interiores de diferentes naturaleza: compuestos volátiles debidos a la actividad, microorganismos como hongos, bacterias o virus procedentes de personas infectadas o por crecimientos interiores, etc.
La calidad del aire interior no se puede garantizar si la ignoramos. El día Mundial de la Calidad del Aire Interior nos recuerda que el aire es un bien indispensable para nuestra supervivencia y que la calidad de mismo no está garantizada si no actuamos a lo largo de la vida útil de nuestros edificios: desde la fase inicial de la concepción arquitectónica hasta la construcción y posteriores mantenimientos, es preciso tomar las medidas y acciones necesarias para proteger nuestra salud.
Por ese motivo, para recordar que ese aire limpio es una necesidad vital, y que su calidad en interiores depende en gran medida de nuestras acciones, se ha institucionalizado el 27 de noviembre como Día Mundial de la Calidad de Aire Interior. Compartiendo ese mismo fin, Bikat dispone de una amplia gama de recuperadores de calor que renuevan el aire de los espacios, extrayendo el aire viciado e introduciendo aire limpio y filtrado, incidiendo claramente en la mejora de la calidad del aire interior. Asimismo, inciden positivamente en la eficiencia energética de los edificios gracias al atemperamiento del aire interior generado a través de la energía recuperada por los intercambiadores, cumpliendo con las premisas más exigentes de la normativa de Ecodiseño Europeo ErP.
